Un canto a la vida, a la sororidad.
Al dolor que vuelve cuando lo llamas.
A los sueños rotos y a los que luego llegaron.
La autora de este poemario se llama Alba Pariente Bueno y firma como Valentina Romanetti. Una mujer de 22 años con muchos sueños por cumplir, como ella misma afirma.
Pero en sus poemas lo mismo te encuentras a Alba que a Valentina que a ti misma o a una persona que conoces. Igual tienes también 22 o lo mismo viajas al pasado o al futuro y te encuentras entre sus páginas con 17 o 38. La magia de los libros, supongo, que son regalos que podemos hacer nuestros.
Entre las páginas de ‘Antes de que nuestros corazones se incendien‘ vamos pasando por fases, al igual que una hoguera que arde. O, mejor dicho, que la hacemos arder.
En el apartado ‘Chica pirómana‘ nos descubrimos en poemas y reflejos.
En ‘Mechero en mano‘ leemos sobre amor, relaciones y anhelos.
Y llegamos a ‘Todo arde‘ con poemas de dolor, de lucha, de rabia, también de sororidad y del empoderamiento que ganamos con todo ello.
Nos encontramos con ‘Intoxicación por humo‘ dejando ir aquello que nos marcó pero al mismo tiempo nos hizo crecer.
El libro se cierra con ‘Cenizas‘ que podría haberse llamado Nostalgia y agradecimiento.
Porque al final todo aquello que arde deja un rastro.
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Editorial Plan B
Ilustración portada libro: Ricardilus
Prólogo de María Murnau (Feminista Ilustrada)
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