Me preocupa mi mamá

Una Frida de 17 años nos pregunta cómo puede ayudar a su madre que sigue sufriendo malos tratos por parte de su pareja. Ahora que la situación ha empeorado empieza a temer por su integridad y la de su familia.

Ilustración: Laura Izquierdo

La historia es larga, pero para que entiendan la explico.

Mi mamá se casó hace ya 6 años, mi padrastro (39 años) siempre fue un macho total: el típico que se enoja si pierde su equipo de fútbol, que no dejaba usar polleras cortas a mi mamá, etc.

Siempre se llevó mal con mi hermana (tenía 17 años en ese entonces) hasta que la agarró a piñas y a patadas en el pasillo de mi casa. Mi mamá no hizo nada y mi hermana se fue de mi casa unos meses, luego volvió.

Cuando mi hermana volvió, la agarró de los pelos, piñas, patadas, insultos, policía, denuncias, bla bla bla. Otra vez mi mamá no hizo nada porque lo amaba y le quería dar otra oportunidad. Mi hermana se fue y nunca más volvió.

Pasaron unos 3 años y acá empieza lo que me preocupa. Ellos empezaron a distanciarse a mediados de febrero porque él se enojaba por todo, gritos y bla bla bla. Ya en junio no se soportaban y peleaban, ahí fue cuando le pegó a mi mamá por primera vez, una pierna morada y la pera también. Cuando le pregunté me dijo que se golpeó con el mueble…Él se quejaba que nos daba de comer, que nos mantenía (mi mamá dejó de trabajar porque a él no le gustaba que trabajara), él empezó a dejar de darle plata a mi mamá y a comprar su propia comida  (y ocultarla para que nosotras dos no la comiéramos). Se la pasaba echado en el sillón sin dejarnos ver televisión ni nada.

Empezó lo peor. No quería ni lavar un plato, todo teníamos que hacer nosotras, poner la mesa, ordenar, limpiar. Mi mamá ya se estaba hartando de todas las peleas, se «separaron» pero seguía viviendo en la casa con nosotras.

Mi mamá conoció a un hombre, y mi padrastro se descontroló. Le rompió él celular, le sacaba la llave del auto, etc. A todo esto ellos dormían separados. Una noche mientras mi mamá se acostaba a dormir en el comedor, él intentaba acostarse con ella. Después de un rato de peleas, se la llevó a la habitación a forcejeos, se escuchaban gritos de mi mamá, diciendo que la dejara en paz que no quería eso. Mi hermana y yo llamamos a la policía.

Cuando la policía llego él se hizo el bueno, que no estaba pasando nada que estaban teniendo «relaciones sexuales» y se bajó el pantalón frente a la policía para demostrar que estaba desnudo, estando yo en frente. La policía habló con mi mamá, ella le dijo que mi padrastro no se quería ir de la casa, que se la iba a quemar y que cualquier cosa los llamaba. Al día siguiente mi mamá me retó por hacer escándalos y llamar a la policía.

Pasó una semana. Mi mamá estaba en mi casa y él llego de trabajar, él quería tener sexo y mi mama no quería, se descontroló. La insulto que era una puta porque según él estaba siempre teniendo sexo con el otro hombre, (cosa que no paso nunca porque siempre salíamos con su hijo y mi mamá al cine, a comer, etc) Mi mamá se fue de la casa hacia la comisaría para hacer una denuncia. Cuando ella volvió hacia nuestra casa mi padrastro la empezó a seguir (antes también nos seguía a donde íbamos, todo el tiempo) y la quiso atropellar con su auto (mi mamá también iba en auto) la encerraba y le cortaba el paso en la ruta. Los vio un patrullero y los pararon, los llevaron a la comisaría donde mi mamá puso restricción y otra denuncia, fueron a mi casa y la policía al fin, logró sacar a mi padrastro de la casa. Estábamos solas, pero nos esperaba en la puerta de nuestra casa por horas, nos seguía.

Cuando estábamos en casa gritaba en la puerta que lo dejáramos entrar. Seguía a mi mamá a su trabajo (trabajó un mes porque no teníamos para comer nosotras). Una vuelta entró a nuestra casa y gritaba que le diera el celular de mi mamá a él porque era suyo, que lo pagó (lo terminó rompiendo contra el suelo). La policía lo dejó buscar más cosas de mi casa. Se llevó hasta el picaporte de la puerta porque él lo había pagado. Se llevó la cocina, la cama matrimonial, el lavarropas, sólo porque él lo pagó.

Pasaron dos semanas y mi mamá no sé por qué carajos lo dejó volver a nuestra casa. Volvió y trajo todo pero eso es lo que menos importa. Las peleas seguían, nada cambiaba, yo estaba re-enojada porque tenía prohibido estar cerca de mi mamá.

Ahora las cosas se habían calmado algo, ambos tienen que ir al psicólogo y por lo menos mi mamá si va, le dan ayuda a la mujer. Le dicen que la postura de ella está perfecta, que no se deje manipular, pero ella se deja sobrepasar.

Hace una semana atrás ya era de noche y todos nos habíamos acostado.Yo tenía insomnio y empecé a escuchar la pelea, murmullos, gritos y más murmullos. Luego había ruidos de cuerpos, como si tuvieran relaciones, pero él le gritaba cosas feas como por ejemplo:

«Yo sufrí por vos hija de puta» «Me la vas a pagar ladrona» «Me cago laburando para que estés contenta y mira como me pagas» «Me cansé de que me rasguñes hija de puta»

Luego empezó a gritar:

«Querés vivir hija de puta?» Una y otra vez lo mismo gritaba.Luego le decía contéstame y así sucesivamente. Me dio miedo que mi mamá no le contestaba porque no podía hablar, hacía ruidos como si la estuviera ahorcando.
Yo asustada llamé a la policía y cuando llegó, él abrió la puerta.

La policía le preguntó por los ruidos y dijo que seguramente era el vecino. (No tenemos vecino)

La policía se fue y empezó a gritar: «Te dije que iba a llamar pelotuda»

Entenderán mi situación como hija y no saber que hacer. Sólo tengo 17 y tengo miedo por mi mamá y por mí.

Mi mamá ha bajado mucho de peso y siempre le miro su cuerpo en busca de rasguñones y moretones y lo peor es que los encuentro. Quiero abrirle los ojos antes que suceda lo peor. No sé qué pasará por su cabeza, ya le he hablado y enviado mensajes por si los razona mejor. Mi abuela tiene un matrimonio parecido y mi mamá siempre se queja de eso, que está mal, que cómo mi abuelo puede prohibirle cosas a mi abuela. Pero si se queja de que eso está mal, ¿Por qué ella se deja hacer lo mismo en su matrimonio?

Perdón por un texto tan largo pero espero que así entiendan todo.
Desde ya muchas gracias y amo su revista <3

Hola Frida. Gracias por escribirnos.

Lamento mucho que a tus 17 estés pasando por todo esto, pues ni vos ni tu familia tienen porqué pasar por estas cosas, nadie merece vivir con miedo ni con violencia.

Lo que han hecho cada una de ustedes es muy valioso, denunciar y tomar medidas para cuidarse a ustedes, la autodefensa es un derecho. Lamentablemente los maltratadores son quienes menos están dispuestos a reconocer sus actitudes y cómo éstas afectan a las demás personas.

En relación a que tu mamá se “deja hacer lo mismo” que tu abuela, pasa que muchas veces repetimos patrones o aprendemos de nuestra familia, las dinámicas de relacionarnos. Pero como todo lo que se aprende, se puede desaprender. Toma tiempo, paciencia y también esfuerzos.

Una manera de ayudar a tu mamá, es buscar ayuda profesional (psicologx, terapeuta), porque las mujeres que son sobrevivientes de violencia, necesitan volver a recuperarse a sí mismas, a reconocer su propia voz, su autoestima y creer en sus capacidades. Otra cosa que pueda ser bastante útil, es tener asesoría legal, no sé muy bien cómo funcionan las leyes en tu país, si hay o no una ley específica para la violencia hacia las mujeres, o qué organismos trabajan para dar acompañamiento en éstos casos. Te invito a animarte a que busquen de ello, vivir sin violencia es un derecho.

Espero que algo de lo anterior te ayude, y siempre podés escribirnos.

Un fuerte abrazo, Hellen.

2 Comentarios

  1. Pingback: Me preocupa mi mamá | Rincón Catártico

  2. Soy psicóloga. Si necesitas y queres podes escribirme a ese mail. No es mi especialidad la violencia de género, pero voy a intentar ayudar.
    [email protected]

Navegar

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.plugin cookies

ACEPTAR
Aviso de cookies