Las mujeres que sí quieren ser putas

Natalia es una Frida que ejerce la prostitución. Ella no se esconde, está orgullosa de su trabajo, y además, ha querido compartir con nosotras su forma de pensar.


Ilustración: Silvia Untz


Cuando reúno en mi cabeza a todas las putas que conozco encuentro en común dos cosas: fuerza e inconformismo. Frente a las adversidades ninguna se quedó paralizada. De nuestros propios errores, hemos sido capaces de construir la realidad que consideramos justa. Para nosotras y por nosotras. No quisimos lo que otros nos daban porque no era suficiente. Tampoco nos creímos lo que se supone que nos merecemos. Aprendimos a seleccionar clientes, y a educarlos para tener con ellos las relaciones que queremos. A decir que no y a tomar decisiones más inteligentes. A empoderarnos con nuestros cuerpos y seguir nuestros instintos.

Luego aparecen seres humanos que proclaman sin ningún miramiento que vivimos llorando en posición fetal, o que nuestros clientes son violadores, y yo, no entiendo nada. Esa gente dice que no soy puta, que lo mío es otra cosa. La prostitución es mi medio de vida y aún así, existe un sector que se niega a reconocer que existo junto a colectivos que llevan décadas luchando por los derechos de las trabajadoras sexuales (en España Hetaira, Aprosex o Genera Derechos). Dicen que somos víctimas, pero no se han enterado de que para llegar a donde estamos, nos hemos liberado de mucho.

Hay un problema social muy grande cuando la gente sólo es capaz de concebir en su imaginario relaciones entre putas y clientes llenas de traumas. Me pregunto por qué y siempre acabo con la idea de que muchas personas siguen convencidas de que la mujer es débil, el hombre es malo, el dinero es un sistema que nos empuja a sacrificar nuestra alma y las vaginas son sagradas. Resulta que no necesariamente el mundo tiene que funcionar así, y es justamente una nueva generación de putas quienes están rompiendo con ello.

La primera vez que me prostituí tenía miedo ¿Qué pasa si abro la puerta y encuentro a un hombre horrible que quiere abusar de mí? Mido algo menos de 1,60cm, soy una “niña” ¿Cómo podré defenderme? Muy lejos de suceder algo desagradable, fue una revelación que puso en evidencia mis inseguridades. Había leído tantos textos que hablan de la prostitución como relación desigualitaria, había visto tantos anuncios de putas como mujeres pasivas y complacientes donde los hombres aplauden esa conducta, que estaba segura de que los roles favorecían al hombre, y si quería trabajar, iba a tener que adaptarme. La realidad es que no tiene por qué ser así. Si seguimos gritando al mundo que el único modelo posible es uno que retrata a la mujer como un sujeto débil, seguiremos implantando miedo y reforzando comportamientos destructivos.

Sabía que podía montármelo a mi manera, pero toda esta visión dominante me hizo dudar. No tardé en probar que la puta es quien tiene el control, quien elige los clientes de acuerdo a sus intereses y que nadie tiene derecho a exigir o forzarme a hacer algo que no quiero. En mi vida me había sentido más empoderada. Lo que me lleva a la conclusión de que el tipo de prostitución que ejerzas es un reflejo de tus capacidades para tomar decisiones según quién eres, dónde estás y qué necesitas.

Con respecto a las necesidades me estoy refiriendo sobre todo a niveles económicos. Esto nos lleva hacia el tan famoso: “Las putas aguantan solo por la pasta. Si pudieran trabajar de otra cosa, lo dejarían.” Como si verdaderamente se creyeran una realidad paralela en donde todxs tienen un trabajo maravilloso que no cambiarían por nada del mundo. Según esta idea, no existen aquellxs a lxs que les encantaría cobrar más, trabajar menos, o hacer algo distinto pero qu finalmente acaban donde están porque simplemente tienen que pagar el alquiler. Las únicas condicionadas por las circunstancias a hacer algo que quizás no harían gratis, son las putas. Pobrecitas. Nosotras que podemos trabajar cuando queremos, con quienes queremos, hacer lo que nos parece conveniente y cobrar por 1h más de lo que gana la mayoría de gente en un día completo.

El dinero no nos ha robado el alma, ha hecho que nos espabiláramos. Dentro de cada historia individual, desde luego, a veces nos podemos encontrar aceptando condiciones que no son idílicas (¿Acaso no sucede esto en otras profesiones? No me he encontrado aún legiones justicieras velando por los obreros que cargan más peso en la espalda del que deberían o trabajan con una seguridad pésima.), pero esto no significa una ausencia de consenso. Aquello a lo que accedemos o no depende únicamente de nosotras. No necesitamos salvadores que den por echo que estamos condenadas por falta de oportunidades. De las opciones que se nos han presentado (y que hemos sabido crear) para salir adelante en nuestro día a día, hemos elegido ésta, y no es asunto tuyo asignarnos un sufrimiento basado en tus ideas sobre el sexo y los genitales de las mujeres.

Es sorprendente la incredibilidad humana para aceptar que hay mujeres a las que no les supone un problema follar con desconocidos o que incluso disfrutamos con ello. Nadie parece darse cuenta deque todos trabajamos con nuestros cuerpos. El “cuerpo” no es el coño. Santificando lo que tenemos entre las piernas de esa manera estamos fomentando la visión de la puta como un mero agujero. En el momento en que centras todo el protagonismo de la prostitución en la acción de follar, estás ignorando el componente humano imprescindible para mantener este trabajo, y estás educando en que ese es el papel que debe jugar la mujer y lo que el hombre como cliente puede esperar (y demandar). Ella solo es un coño, él solo busca un coño.

Es el estigma el que nos cosifica, no la prostitución en sí misma. Las relaciones con nuestros clientes son complejas a nivel emocional. Requieren de habilidades sociales y empatía. Y sí, también nos hace falta saber cuando mandar a la mierda a alguien que quiere pasarse de listo, pero tranquilxs que lo tenemos cubierto.

Ser puta no es un trabajo para cualquiera. Tampoco lo es ser camarero o físico cuántico, pero son trabajos y nadie lo discute. Las putas estamos cansadas de encontrarnos con discursos que nos infravaloran, como si fuéramos sujetos que han perdido todo el control sobre su propia vida, y son arrastrados por la maldad infinita de hombres que quieren follar con ellas pagando. No pongáis en duda los testimonios de las putas que demuestran una sexualidad sana, son justamente esos los que hay escuchar. Son los que demuestran que las cosas pueden cambiar a mejor.

Natalia Ferrari (24)
http://www.nataliaferrari.com/

Imagen: Silvia Untz,

 

46 Comentarios

  1. Para mi entender hay dos tipos de prostitución, la que se elige, y la que se hace por necesidad. Si tu eliges ser prostituta, ole tus ovarios, si lo haces por necesidad, eso ya es otro tema.

    Pero que cada uno haga con su cuerpo lo que quiera en el siglo XXI ¿no? Bastante nos ha costado a la mujer tener esta «libertad» de ahora como para que sigamos siendo juzgadas por como utilizamos nuestro cuerpo.

  2. Me encantó la forma en que las feminazis responden «tienes derecho a sentirte empoderada con tu cuerpo, siempre y cuando lo hagas de la forma que yo considero correcta» jajajaja. El artículo: bellísimo, revelador, disruptivo. Me encanta.

  3. Uff, había escrito un montón y se borró! Pero trataré de explicar mi punto de nuevo:
    Creo que la prostitución es el resultado de siglos y siglos de dominación machista hacia la mujer, y ya vemos que aún en pleno siglo XXI, con todos los avances tecnológicos, sociales y culturales, no hemos avanzado en este tema. Está bueno leer el punto de vista de una prostituta, pero en nada cambia el problema de fondo: Nuestra sociedad fomenta el odio y desprecio hacia la mujer, al punto de considerarla sólo como un objeto, sea para satisfacer sus placeres sexuales o sea para satisfacer su deseo de continuar la especie (buscando una mujer «digna y honrada», que tiene que ser todo lo contraria a una puta). El mismo tipo que consume prostitución luego reclama que su mujer sea honrada. A ambas las usa.
    Natalia, si te parece que sos libre y te sentís bien trabajando de prostituta, allá vos. Pero espero que en algún momento te preguntes por qué no hay prostitutos, por qué en la ciudad no vemos papelitos de prostitutos ofreciendo sus servicios a las mujeres (creo que los pocos que deben haber, son para satisfacer a su propio género).
    Entonces, si las mujeres no consumen prostitución (y no es porque no nos guste tener sexo), ¿por qué el hombre sí? ¿Por sus «instintos irrefrenables»?. Serán los mismos instintos irrefrenables que lleva a que tantos hombres violen y abusen a las mujeres. Pero la culpa la tenemos siempre nosotras por «provocarlos».
    Y así vivimos en una sociedad en la que la mujer directamente no tiene un lugar donde ser ELLA. Las publicidades nos muestran como estúpidas que sólo viven para hacer dieta o limpiar la casa, mientras los hombres se divierten tomando cerveza con sus amigos (y con unas putitas).
    Yo me cansé de aceptar toda esa farsa. Las mujeres tenemos derecho a sentirnos cómodas, a caminar por la calle sin que nos griten cosas, a que no nos digan que somos unas putas porque nos vestimos como queremos.
    Seguramente vos te hayas sentido identificada con varias de las cosas que dije, y pienses hasta qué punto sos realmente «libre».
    Vos decís que no te sentís víctima y que estás harta de que te traten de «pobrecita». Yo, con 25 años y abogada, supuestamente con todas las herramientas para «triunfar en la vida», siento que soy víctima de todo este sistema perverso que no me permite ser realmente yo, sin que me traten de cosificar, humillar, denigrar, acosar, etiquetar.

    Las invito a mi página, que creé hace unos días, respecto al acoso callejero, y en el que abordo todas estas temáticas referidas a la violencia machista en la sociedad: https://www.facebook.com/acosadorescallejerosargentina/?ref=hl

    Saludos.

  4. Natalia, me gustaría saber si trabajás por tu cuenta, o si tenés personas que te emplean de alguna forma. Porque es un trabajo del que no se tiene mucho conocimiento (al menos que consumas prostitución o la ofrezcas), y cada vez empiezan a haber campañas de concientización sobre la trata de personas. La trata no es sólo que te esclavicen obligándote a tener sexo contra tu voluntad (como le pasa a millones de mujeres en el mundo), sino también que alguien saque provecho de TU cuerpo. En el caso de que fuera así, que hay gente que lucra con tu cuerpo, el tema de la libertad me parece totalmente falso. La única libertad la tienen quienes consumen tu cuerpo y quienes sacan dinero de eso.
    Pero suponiendo que vos sos independiente y jefa de vos misma, así y todo, ¿no te hace ruido que no existan prostitutos hombres (y vuelvo a mencionar que desgraciadamente son temas que la gente no tiene mucho conocimiento, pero apuesto que si existen prostitutos son principalmente para satisfacer a su propio género). Si supuestamente las putas no son víctimas y hay una relación de igualdad, ¿entonces por qué no hay también putos que cobran por sexo a la mujer? Porque desde hace cientos y cientos de años se fue formando una sociedad patriarcal, en la que todo está diseñado por y para el exclusivo confort del hombre. Ni siquiera la esposa ama de casa que cree que es digna y honrada escapa de este sistema perverso: Somos todas objetos que sólo sirven como medio para el placer del hombre. Como todos los objetos que tengo en mi casa: Los uso a mi antojo y jamás me preguntaría si están cómodos aquí (porque además son objetos inertes y si les hablase estaría mal de la cabeza, jaja 😀 ).
    Bueno en fin, siempre tuve curiosidad de escuchar la óptica de una prostituta, hace unos años leí un libro escrito por una puta, el cual recomiendo: «Ninguna mujer nace para puta». La mujer da un relato demasiado descarnado, en el que además de contar las historias relacionadas con el trabajo (que son de una humillación y degradación tremendas) da un análisis muy sesudo sobre por qué existe la prostitución, y quiénes son los verdaderos cómplices y beneficiarios.

    Para terminar, el hecho de que vos no te consideres víctima no te vuelve ajena: Estás en una sociedad machista, que odia a tu género, y en el que tu trabajo es consumido por los mismos hombres que luego agreden a otras mujeres llamándolas «puta», como si eso fuese un insulto. ¿Cómo lo defendés a eso? Los hombres piden a las putas y piden también que hayan mujeres recatadas para dejarlas preñadas y tener descendencia. La aborrecen a ambas.

    Por eso es que yo sí me considero víctima de este sistema perverso, por más que sea abogada y supuestamente tenga todas las herramientas para «triunfar» como cualquier hombre.

  5. SABRINA JAZMIN SEGOVIA

    ES UNA OPINION SINGULAR QUE POR LO VISTO DEBE TENER FACILIDAD PARA REDACTAR DISCURSOS EN DONDE TODOS SABEMOS QUEEN LA ACTULIDAD 2016 NO PODEMOS TOMAR A LA PROSTITUCION COMO UN TRABAJO SI COMO UNO DE LAS TANTA VIOLENCIA QUE SOMOS SOMETIDas LAS MUJERES .
    ES OBVIO QUE UNA MUJER QUE OFRECE SEXO SIN LIMITES QUIERA JUSTIFICAR LO INJUSTIFIBLE.
    LA PROSTITUCION ES VIOLENCIA Y ES MUY POBRE EL ARGUMENTAR QUE SE VIVE DE BUENA MANERA . SI UNAS POCAS VIVEN DE BUENA MANERA DE 10 MUJERES QUE SE PROSTITUYEN 1 VIVE BIEN ECONOMICAMENTE Y EL RESTO EN CONSTANTE VULNERAVILIDAD.

  6. Hay un estado de cosas y no se puede pretender cambiar o reformar aspectos de la prostitución, la prostitución tal cual se da surge inevitablemente del patriarcado.

    Dices que «Aprendimos a seleccionar clientes, y a educarlos para tener con ellos las relaciones que queremos. A decir que no y a tomar decisiones más inteligentes». Se te olvida un principio básico de la filosofía del mercado: «El cliente siempre tiene la razón». Ahora resulta que la prostituta es la que siempre tiene la razón, y que ahora los hombres que contratan esos servicios son todos unos sumisos con moral de esclavo. Dices que has aprendido «a empoderarnos con nuestros cuerpos y seguir nuestros instintos», al igual que un país no puede empoderarse a costa de ceder soberanía a un órgano supranacional, tú no puedes empoderarte con tu cuerpo cediendo la soberanía del mismo por dinero.

    Dices que «Si seguimos gritando al mundo que el único modelo posible es uno que retrata a la mujer como un sujeto débil, seguiremos implantando miedo y reforzando comportamientos destructivos.» Mejor olvidarlo, eliminando la causa por la que luchar se acaban los problemas. PERO LA REALIDAD SIGUE SIENDO ASÍ, no podemos olvidar que hoy en día siguen muriendo mujeres y mujeres por violencia de género, no podemos olvidar que hoy en día el 99% de los demandantes de prostitución son hombres, y por tanto no podemos olvidar que una mujer que se prostituye está aceptando cumplir la voluntad sexual de un hombre, en contra de la suya propia (ya que el dinero funciona como factor de coerción; el dinero es el fin, no la relación sexual).

    Por tanto la única manera de que la mujer no sea un sujeto débil pasa por proclamar la igualdad entre mujeres y hombres, igualdad que se consigue empoderando a la mujer. Una prostituta no puede abanderar ser feminista predicando la lucha por la igualdad y a la vez pretendiendo que la prostitución “cambie a mejor”. Lo único que hace así es crear confusión haciendo del feminismo una lucha vacía que perpetúe el régimen patriarcal.

  7. A mi me parece muy interesante la manera de ver tu vida y tu profesión u oficio. Pero te agradezco la manera en que redactas tu realidad, es tan necesario abrir la mente, ya quelos tiempos están cambiando muy rápido. Tengo 24 años, estoy casada, tengo una hija y soy profesora… Y comparó tu realidad con la Mía teniendo la misma edad que vos. Me doy cuenta de muchas cosas. Me encanto leerte. Suerte

  8. Si existiera un sistema diferente en el cual las mujeres y hombres tengamos iguales libertades sin ser estigmatizados, en donde todos puedan tener las parejas sexuales que quieran del sexo que quieran tendríamos una humanidad más sensible y menos violenta. gracias Natalia me a encantado tu artículo, un punto de vista del cual pocos conocen y que existe. saludos y besos

  9. Coincido con casi todo lo que dice en este bonito artìculo , sin embargo no coincido del todo en eso de la «victiminizaciòn» recordemos tambièn que debido a la trata de personas muchas de estas mujeres fueron inducidas a la prostituciòn de manera obligatoria , ella sno tuvieron la oportunidad de elegir y es por ellas por las que debemos sacar cara.

  10. Kiaranulla

    El articulo es inspirador!muchas gracias por él!!!
    Realmente cuando decides dedicarte a esto,es eso,una decisión personal ,si bien forzada a veces por una escasez laboral y/o económica;por supuesto hay muchos casos de experiencias traumáticas con hombres,pero es qualquier situación laboral hay momentos de tensión,y hay que saber lidiar con ellos,debes aprovechar el
    Momento y saber dar la vuelta a lo negativo.
    Disfruto mucho del trato con mis clientes,ellos se sienten agusto conmigo y por supuesto con cada uno de ellos es placentero y una grata experiencia,he
    Aprendido muchas cosas al conocer tantas personas y eso te enriquece en muchos aspectos.
    Por supuesto que la trata de blancas y de menores es algo que ha de exterminarse inmediatamente ,igual que qualquier situación laboral extrema que haga daño al trabajador/a.

  11. Nerea Esencia

    Hola Natalia! Estoy infinitamente agradecida por tus palabras, no sabes el bien que me hacen, casi llegan a emocionarme 🙂 Este es un tema con el que ando en batalla interna desde hace ya tiempo, es una de las asignaturas pendientes como feminista y como apasionada por ampliar el conocimiento y visión de la realidad. Del que más me cuesta aprender, obviamente por la basura aprendida…
    Pocos textos como el tuyo he leído que dinamiten todos los ‘peros’ que tengo, que aclaren todas las dudas y que me ayuden tanto a abrir la forma de ver, como si se tratara de un simple ‘click’. Echas abajo los juicios y el ego. Agrandas la comprensión, la empatía, el amor al fin y al cabo. Te he sentido tan cerca, tan hermana!
    Qué maravilla, no sabes lo contenta que estoy de haberte leído!!
    Gracias bonita, gracias a personas como tú es posible construir la vida que queremos 🙂 Un abrazo inmeeeeeenso

  12. ¡Hola Natalia!
    Gracias por el artículo, me ha gustado mucho. Completamente de acuerdo con que cuando la prostitución es una elección libre de una persona adulta, es una elección tan lícita como cualquier otra. Vivimos en un sistema en el que ofrecemos parte de nuestro ser a cambio de dinero. Y solo cuando lo que se ofrece es el cuerpo se ve como un problema.

    Coincido en que mucha gente ve a todas las personas dedicadas a la prostitución como víctimas. Yo no lo veo así, cuando pienso en víctimas de la prostitución pienso en los casos de trata de blancas, de prostitución infantil. Aunque tal vez entonces la palabra prostitución no sería correcta sino que deberíamos hablar de víctimas de violencia sexual.

    Saludos!

  13. TOTALMENTE FALSO DE TODA FALSEDAD QUE EL ABOLICIONISMO DIGA: «la mujer es débil, el hombre es malo, el dinero es un sistema que nos empuja a sacrificar nuestra alma y las vaginas son sagradas.». EL ABOLICIONISMO DICE QUE: la prostitución se basa en la creación social de que las necesidades sexuales del hombre pueden satisfacerse. Ellos tienen necesidades a satisfacer y existen mujeres para esta necesidad: las putas, -si no queda el recurso de la violación- :Es decir: EL DESEO MASCULINO PUEDE SATISFACERSE TENIENDO DINERO O POR LA FUERZA. Esto es cultural. Es un derecho que se otorga culturalmente a los hombres. EL CONCEPTO DE PROSTITUCIÓN ES UN CONCEPTO PATRIARCAL. La sociedad estaría organizada de una manera muy diferente si fueran nuestras fluctuantes necesidades sexuales el eje organizador, seguramente no habría monogamia y pareja permanente. Si ustedes quieren convencerse DE QUE SE EMPODERAN, pobrecitas, dan lastima.La moral me la meto en el culo. me da lo mismo vender la vagina que vender el útero, que vender un riñon, se vende el cuerpo porque es el último recurso.

    • Totalmente de acuerdo Carmen.

      Un libro que me parece muy recomendable sobre el tema,Neoliberalismo sexual, el mito de la libre elección.

    • Soreta,forra de mierda,infeliz…hablas como si nos conocieras a todas idiota

  14. Estaba esperando algo como esto desde hace tiempo, me encantó!! De hecho es un tema que me interesa mucho, he conocido a un par de chicas que también trabajan con sus cuerpos e igual eran como Natalia, nada de traumas ni de estar obligadas no, lo hacen con orgullo y les gusta además. Siempre me ha parecido irónico que muchas feministas alimenten ese estereotipo de la pobrecita puta sumisa y maltratada y que si apoyas la prostitución apoyas violaciones y maltratados, a mí siempre me pareció una exageración o en todo caso una falsa generalización, siempre he sido algo escéptica, por eso me interesa este tema, quiero conocer más puntos de vista reales, de las mismas mujeres que trabajan en ello. Y además, como mujer a la que le encanta el sexo y no es muy convencional que digamos, siempre amo ver a otras mujeres que se salen de la norma, que disfrutan del sexo, de su cuerpo como les da la real gana y además con orgullo y sin vergüenza ni culpabilidades, olé.

  15. Me alegra mucho ver tantos puntos de vista sobre este tema. Me parece que mientras nuestra forma de vida nos haga plenamente feliz no hay nada que criticar. En mi caso solo he hecho el amor con un solo hombre durante toda mi vida a quien consideró mi mejor amigo para todo. Puedo decir con seguridad que he encontrado a alguien con quien puedo compartir mi felicidad. Disfruto de su compañía y también de mi soledad, cuando la tengo. Considero que es el estilo de vida que mi esposo y yo hemos decidido tener y del cual nos sentimos muy felices. Me parece que cada quien tiene su propia forma de amar y mientras estas formas no lastimen a nadie, no veo la necesidad de criticar. Creó que la felicidad se basa en las decisiones personales y en seguir aquella filosofía que nos haga felices. Igual es la decisión de tener hijos, no hay que criticar o lastimar a la gente que por una u otra razón decide no tener hijos. Fue su decisión y eso los hace felices. Igual que en su caso, les apasiona lo que hacen y las hace felices y eso es lo mas importante para vivir plenamente desde mi punto de vista.

  16. Naaaa muy genial, clarísima y con unos ovarios querida!!! Aplaudo de pie!

  17. Estaba leyendo cual me pareció muy interesante, porque expresa una opinión que no suele escucharse. Y usted tiene razón, según el sistema laboral todos somos objetos, sólo números y sólo servimos para generar dinero, no hay diferencia entre lo que usted hace y yo hago. Y estoy totalmente de acuerdo con que todos merecemos respeto porque somos iguales. Sin embargo leer esto me genera las siguientes preguntas: ¿Qué tipo de prostituta es usted, que puede elegir a sus clientes? yo vivo e Costa Rica y soy voluntaria en una fundación que ayuda a jóvenes a salir de la prostitución. Y los testimonios que ellas dan son acerca de condiciones infrahumanas de trabajo, abusos, mala paga por parte de los proxenetas, entre otras. Para ellas ser prostitutas o prostitutos porque también trabajamos con ellos, es algo que no se lo desearían a nadie.

    Creo que el asunto a tratar aquí es la doble moral porque todo el mundo puede estar de acuerdo con que usted esté orgullosa de ser prostituta pero cuando un grupo de prostitutas se reúnen para reclamar derechos de trabajo como seguro social, ayuda médica, entre otras cosas muy pocos se unen a ellas, porque la sociedad, al menos en mi país, suele decir qué importa son prostitutas ellas eligieron serlo; o cuando matan a una prostituta dicen pobre, pero bueno ella se lo busco…

    Agrego que esto no se trata de ser el sexo débil o fuerte porque de que todos aguantamos pues si aguantamos, pero ¿donde queda nuestro valor como seres humanos? que al final de eso estamos hablando acá.

    Yo sabiendo lo que sé, habiendo observado daños que les han causado a niñas y mujeres por ser prostitutas, no me lanzaría a decir tan libremente que la prostitución no está tan mal, como medio para sobrevivir. Que usted tal vez haya tenido suerte a la hora de desempeñar su trabajo no indica que todas la tengan, hay muchas prostitutas muriendo en estos momentos porque sus condiciones laborales son deplorables. Así que me parece que este artículo se queda corto, me parece que la posición expuesta es muy egoísta, porque sabiendo usted que se puede desempeñar su trabajo de una manera respetable, escogiendo clientes y viviendo feliz. ¿Cómo puede obviar al resto de muchas putas que no pueden?. ¿Qué se ha hecho para que todas las putas del mundo puedan gozar de las mismas condiciones? Creo que eso es lo que haría una verdadera Frida expresar otra manera de hacer las cosas, otro pensamiento, crear posibilidades y no sólo conformarse con la realidad. Que no por ser realidad en estos momentos quiere decir que está bien.

    • Marina Gil

      Es que Natalia, al igual que yo, que también soy puta, no ignoramos los casos que tú mencionas. El problema de esos casos no es la prostitución son las condiciones laborales y el estigma que las mujeres acepten condiciones pésimas para ejercer su trabajo.

      Si hablamos claro de NUESTRA prostitución es para que se vea que se puede ser puta y libre y no se estigmatice a la que lo es; pero también para que quien se plantea ser puta vea que no tiene porque meterse en esto de cualquier forma aceptar cualquier condición pensando que es lo normal; porque NO lo es. Que determinades condiciones son más cercanas a la trata (y la trata NO es prostitución, es esclavitud) que a la prostitución. Reclamamos que se permita ejercer libremente y con derechos laborales para evitar casos tan horribles como los que has podido ver y que no haya proxenetas de por medio lucrándose de explotar a otras personas.

    • Totalmente de acuerdo con tu opinión Rebeca. Esperaba más de este artículo, hasta que lo acabé y solo encontrpe a una joven relatando su buena suerte o su libertad de decidir, como ella lo llama. Referirse a ella misma como prostituta o puta creo que es muy insensato porque desvalida el sufrimiento de muchxs jóvenes explotados sexualmente, que el número de estxs es mucho mayor a lxs trabajadorxs sexuales que tienen la libertad de elegir a ssus clientes y otras condiciones.

  18. Maria José Ribaudo

    Natalia tu punto de vista me parece super interesante! Me encantó este artículo. Yo también apoyo la prostitución y la decisión de cada quien de ser puta. Siento que hoy en día, formas de vida más ¨liberales¨ deberían no solo ser aceptadas pero de alguna manera incentivadas. Ya que de esta manera, la práctica de este trabajo sería aun más segura. Ojalá la prostitucipan se legalizara porque así las mujeres que deciden ser putas se sentirían mejor, más seguras y aceptadas. Esto ayudaría en el ambiente económico de los paises. Es hora de concientizarnos en que las mujeres no son objetos de los hombres, que tomamos nuestras propias decisiones a base de muchísimos aspectos externos, que no hay malos en la historia y que ambos sexos tenemos el mismo poder.

    Me queda una duda acerca de tí. ¿Y cuando te cases qué? ¿Seguirás siendo puta? Es decir, separas el ¨sexo¨ de ¨el amor¨. ¿Tu esposo deberá aceptar esto, o te dedicarás a otra cosa?

    • Hola María,
      Gracias por tu comentario.

      Me parece interesante no asumir que todas las mujeres son heterosexuales y que quieren casarse. Dicho eso, mis parejas y los lazos que construya con ellas serán siempre entendiendo que esto forma parte de mi vida y mi identidad. Hay muchos modelos de relaciones y no siempre incluyen una exclusividad sexual y/o afectiva.

    • Tu comentario me parece muy cierto y coincido totalmente contigo pero tu últimas frases son un poco wtf no todas las mujeres quieren casarse ¿sabes? yo una de ellas, me choca que sueltes esa pregunta como si todo el mundo fuera a casarse… y además como bien a dicho Natalia tampoco hay que asumir que todas las mujeres son heterosexuales. Deberías preguntar antes si la persona en cuestión está interesada en el matrimonio. Sólo para hacértelo saber por si aún no te has dado cuenta: no todas las mujeres tenemos como meta en la vida casarnos, ni ponemos a nuestros esposos/parejas por encima de todo, si ya lo sabías perdona por malinterpretarte pero tus últimas palabras parecen indicar que ni se te han pasado por la cabeza esas posibilidades.

  19. A aquellas que dicen que se idealiza el trabajo: Les diré que ningún trabajo es ideal, ni es udeal que se tenga que trabajar para vivir, pero es lo que hay. Hay quienes tienen su trabajo de reponedoras, cajeras, niñeras, trabajadoras domésticas, trabajadoras sexuales, abogadas, enfermeras y un largo etc que idealicen y quieran su trabajo y otras muchas que no, que es un mero medio de vida para no terminar viviendo en un cajero y poder mantener a nuestrxs hijxs, padres y a nosotrxs mismxs.

    Si a todas las que no son trabajadoras sexuales no se les cuestiona el porqué ejercen ese trabajo ¿por qué a las putas si? ¿con qué derecho otra mujer que se considera feminista puede cuestionar a otra su manera de gestionar su libertad personal y su cuerpo?

    Que hay gente esclavizada sexualmente, sin duda, y nos oponemos todas terminantemente a ello, pero hay otros sectores donde la explotación laboral y la esclavitud campan a sus anchas y de eso no decís nada.

    Si, son las circunstancias las que nos hacen entrar en el trabajo sexual para sobrevivir, pero somos muchas las que elegimos libremente quedarnos en este trabajo y exigimos nuestros derechos.

  20. Me parece muy positivo escuchar otro punto de vista, supongo que como tú, habrá más prostitutas que lo vivan igual pero existe una realidad muy diferente para muchas mujeres que hacen ese trabajo, algo que no veo reflejado en tu texto. Entiendo que hablas de ti y tus vivencias pero me parece que la visión que ofreces puede inducir a error, a mostraros la prostitución como el trabajo ideal, donde eres libre de elegir clientes, poder trabajar cuando se quiera, cobrar mas dinero que mucha gente…y que ni mucho menos todas las prostitutas viven esa realidad.

  21. Daniel Fleitas

    Todo muy bien, comparto y respeto tus expresiones muy vivenciales al parecer pero te equivocas terriblemente en que hay una «nueva generación de putas», en Uruguay existe Naná hace 40 años y hasta candidata política ha sido, esa parte del texto es sólo hipérbole; tan el oficio como las orgullosas y congruentes con su profesión son antiguas como la humanidad.

  22. Creo que este es el debate más interesante por estos días para cualquiera que se considere feminista. Milito en una organización feminista y este es el punto más controversial de nuestra discusión. Llamarse abolicionista es fácil, pero aparecen historias como esta y te llevan a cuestionarte todo.
    La historia que narrás acá parece ideal, no se vislumbra ni un ápice de sufrimiento. Sin embargo no conocí nunca a una prostituta en esta situación. Me surgen muchas preguntas con respecto a lo que se considera habitualmente comercialización del propio cuerpo. Sería muy interesante un debate cara a cara entre tu postura y la abolicionista.
    Saludos.

  23. Creo que se idealiza mucho la prostitución en este texto. Las feministas no tratamos a las mujeres como objetos débiles, sino como sujetos oprimidos por el orden patrialcal. La prostitución es parte de ese orden, por eso existe desde que surgió el patriarcado.En sociedades no patriarcales no existió prostitución.

    • Harry Montiel

      Natalia no està idealizando la prostitución, simplemente habla de ella misma. Asì mismo, la prostitución no es parte de un orden patriarcal, sino que tiene que ver con algo más profundo y complejo que es la sexualidad másculina y femenina. Son esas diferencias sutiles pero profundas y poderosas lo que hace que la mujer tenga una superioridad en el plano sexual, superioridad de la cual no está consciente y que incluso la hace sentir insegura.

      Yo no tengo la verdad absoluta asida por el mando, pero hay una frase que resume esto a la perfección, escrita por Boccaccio en el Decamerón: UN GALLO PUEDE BASTARSE PARA 11 GALLINAS, PERO NI 9 HOMBRES PUEDEN SATISFACER A UNA MUJER.

      Bueno, X, no me hagas caso, simplemente se me figurò que tu comentario tiene muchos prejuicios.

      Saludos.

    • Berta, pensé lo mismo al terminar de leer el artículo. Comparto tu opinión. Saludos!

  24. inesperta

    Hola, soy voluntaria de una ong que trabaja con personas en situación de prostitución y me siento obligada a dar voz a las mujeres con las que trabajo porque ellas no participan en foros, simposios ni escriben en revistas, siempre escucho opiniones de una prostitución que ni yo ni nadie que me rodea conoce,así que voy a hablar de la que conozco, de mujeres valiosas a las que les han hecho creer que no valen nada, de mujeres con más incidencia de consumo de drogas y de enfermedades mentales que el resto, a mujeres a las que les tenemos que dar lubricantes para que no les duelan las relaciones sexuales que practican, ya que ellas no lubrican ya que no disfutan. Ellas (porque las personas en situación de prostitución son en una 90% «casualmente» mujeres), también en un 80% son «casualmente» inmigrantes y «casualmente» de países pobres. ¿No nos preguntamos por qué la mayoría de personas que se prostituyen son mujeres? ¿por qué no son 50% hombres y 50% mujeres? La prostitución es un mercado creado por los hombres para el disfrute de los hombres, en el que el hombre no busca el disfrute sexual (la mayoría de consumidores pueden tener relaciones sexuales sin pagar) lo que buscan es una relación en la que puedan dominar, porque una relación desigual sí les es más difícil de conseguir sin pagar. Este mercado se sustenta gracias a un ideario sexual colectivo patriarcal en el que el hombre es el sujeto activo y poderoso de la relación sexual y en el que poco importan las preferencias y gustos de la mujer, y este imaginario colectivo se alimenta a su vez de los anuncios machistas y la pornografia machista en el que la mujer es claramente el sujeto sumiso. La mayoría de las mujeres en situación de prostitución son pobres y están en situación de exclusión social, y les es muy difícil salir de esa situación por dependencia emocional con otras personas, por dependencia de sustancias y por el complejo sistema de adaptación de los seres humanos. ¿débiles? no, no son débiles, o al menos no más que el resto.
    Después de comentar la realidad que vivo de cerca, quiero decir que me alegro que mujeres como la que escribe haya logrado reconducir la situación para que se den relaciones de igualdad, elegir a sus clientes y disfrutar de lo que hacen, pero si que pido que por favor, no olvide que su situación es minoritaria , que haciendo creer que toda la prostitución es así estamos perjudicando a las mujeres más desprotegidas, que ellas no tiene voz, no participan activamente en la sociedad, pero son igual de importantes, y la sociedad , y sobretodo el feminismo, no se debe olvidar de ellas. No olvidemos de dónde viene la prostitución y que es lo que la sustenta, el patriarcado y el capitalismo, la idea de que todo se puede comprar, y si ese algo es de una mujer más. No olvidemos que el sexo es libre, pero libre con mayúsculas. Y quien apueste por una regularización, que no se olvide de que vivimos en un mundo global, y que las leyes aquí tienen consecuencias en otros países empobrecidos en el que mujeres son educadas para venir a prostituirse a paises más enriquecidos. No nos olvidemos que no todas somos mujeres blancas, europeas, de clase media.

  25. Pilivet Aguiar

    Hola! me encantó tu relato. Es claro, conciso y revelador de las características de personas que eligen un trabajo como cualquier otro. La única parte que me mosquea es aquella en la que mencionas que «…el tipo de prostitución que ejerzas es un reflejo de tus capacidades para tomar decisiones según quién eres, dónde estás y qué necesitas.»
    Me preocupan las otras chicas, las migrantes que vienen de Centroamérica o Chiapas (México) a trabajar a Cancún, y que terminan trabajando en la prostitución casi en calidad de esclavas. Me parece que no sólo las capacidades propias tienen que ver con el ejercicio del trabajo, sino el contexto educativo, económico y social del que provienes y en el que te encuentras. No todos los contextos permiten elegir todas las opciones.
    Asimismo me parece maravilloso que se evidencie la relación vertical entre quienes quieren «protegerles» y ustedes, como si hubiera una sola visión válida y es la de aquellos que «hablan por ustedes», en vez de hablar con ustedes.
    Saludos desde México, y muchas gracias.

  26. Entiendo que este texto habla de tu cuerpo, tus decisiones, tu vagina, tus convicciones, tus sentimientos, tus necesidades, tus objetivos, tus conclusiones, y cuando no hablas de ello, hablas de opiniones de terceros con el único objetivo de consolidar tus propias afirmaciones. No dices más que «Las relaciones con nuestros clientes son complejas a nivel emocional. Requieren de habilidades sociales y empatía.», y no profundizas ni un ápice en la parte más importante de esta profesión, que es el cliente y la «sociedad» que se forma con dichas habilidades sociales y empáticas que citas, cuya única mención es «mandar a la mierda a alguien que quiere pasarse de listo» (¿que significa exactamente pasarse de listo en este contexto?).

    Mi visión de la prostitución nace de ahí, del cliente y de la entente creada por ambas personas. Me acongoja que alguien deba entrar en contratos comerciales por disfrutar de las más grandes y bellas cualidades que nos hacen ser seres humanos, y me entristece aquel que trafica con ellos. Podría resumir, me produce cierta tristeza aquel que monetiza su sexo. Si consideramos aquel que tambien monetiza sus sentimientos, entramos ya en terrenos peligrosamente psicopáticos, los cuales no se pueden confundir con la vileza que representa la monetización de los sentimientos ajenos. Muchas personas lo hacen, tanto de manera consciente como inconsciente, siendo «el yo» y la más tremenda falta de empatía los lugares comunes.

    Me resulta fascinante que podamos tener puntos de vista tan distintos.

    • Harry Montiel

      Creo que la visión que tienes de la prostitución se limita a una educación católica-familiar… no soy nadie para decir si eso está bien o está mal, pero te olvidas que los seres humanos somos increiblemente complejos y que hablar de la prostitución es algo que no se puede limitar a un intercambio comercial de CLIENTE y SEXO SERVIDOR/A.

      Por otro lado no creo que nada te de derecho a acongojarte por alguien que deba entrar en contratos comeriales para disfrutar de las más bellas cualidades que nos hacen ser seres humanos. De hecho, el sexo es lo más común entre las demás especies de este planeta, no es privativo de los serfes humanos. No sé por qué piensas que tienes derecho a entristecerte por aquel que monetiza su sexo… Eso habla de que tienes un concepto de tí como de alguien muy superior a nosotros, pobres mortales.

      Pero ni caso me hagas, sólo opiné y ya… no soy nadie para decirte nada, carnal.

      Abrazo, carnal.

  27. Mar Colorma

    Alguien sabe si esta chica está soltera?

  28. increíble.
    Participé en una charla-debate sobre el tema, y quedé decepcionada.
    Observé tristemente como quienes se abanderaban de ser defensoras de las mujeres prejuzgaban, encasillaban y hasta insultaban a compañeras. Escuché como les decían «putas» desde el odio más profundo y patriarcal, las únicas prostitutas que se encontraban en el lugar se fueron llorando y sin poder ser entendidas por el colectivo que supuestamente las protegía. Y aunque supe desde ese instante que yo me encontraba en la vereda de enfrente, no había podido cerrar del todo mi opinión al respecto.
    Hasta que leí este maravilloso texto, que debería ser compartido y discutido en los próximos encuentros de mujeres alrededor del mundo. Con la simpleza de lo autobigráfico describiste el enfoque ignorado de miles de mujeres empoderadas.

  29. wow
    De pequeña crecí en una familia donde la intelectualidad se llevaba por sobre todo, había mucha libertad pero una frase me quedó siempre dando vueltas:
    «mijas, ustedes pueden estudiar y trabajar de lo que quieran, menos de putas»
    Sé que se necesita tener un corazón muy grande para aceptar pasar el rato con alguien que quiere sexo y que no conoces… o conoces muy poco.
    Creo que es admirable.
    Conocer el valor de la buena compañía que das.

    • Hola Javiera! Muchas gracias por tu comentario. Ten en cuenta que nosotras también queremos tener sexo con nuestros clientes y en caso de que no, lo hacemos porque nos compensa y no nos supone ningún daño. No cualquiera vale y eso está bien.

      Un fuerte abrazo

  30. Me fascino, esto de entender y tener un punto critico hacia la prostitución es algo que hace muchísimo tiempo me interesa pero las teorías que leí no me cierran o convencen. Apuesto a la elección de cada persona, pero realmente veo una realidad muy diferente, chicas a mi alrededor muy jóvenes ejercen la prostitución con mucha sumisión creyendo la teoría que ser prostituta es vender sexo de cualquier tipo aunque no te guste y a hombres detestables, no quiero pasar al estereotipo de prostitutas que se tiene pero en verdad ellas lo viven así. Tu forma de vivir y como consideras tu trabajo realmente me hace reflexionar bastante, agradezco demasiado que se compartan estas experiencias.

    • Hola Flor! Gracias por compartir como te sientes con el artículo. Justamente lo que pretendo mostrar con este texto es que no tiene que ser así: prostitución con mucha sumisión creyendo la teoría que ser prostituta es vender sexo de cualquier tipo aunque no te guste y a hombres detestables

      Eso es solo una realidad y se puede construir una más sana y agradable.

      Un abrazo!

Navegar

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.plugin cookies

ACEPTAR
Aviso de cookies